Política local - Ayuntamiento

OPINIÓN: Antonio Sánchez Requena "Si se podía"

8 Feb 2016

El Partido popular abre "La Sala" la noche de carnaval para Nuevas Generaciones.

El pasado sábado el espacio sociocultural La Sala acogió una fiesta de disfraces organizada por Nuevas Generaciones, La asociación juvenil del Partido Popular.

Durante los más de 4 años de gobierno del PP, La Sala tampoco se ha librado de la furia popular contra todo lo que oliera a PSOE. Por ese motivo y con las excusas más peregrinas: la falta de seguridad, el alto coste de abrirla, los posibles destrozos provocados por los incivilizados caudetanos…  numerosos colectivos y asociaciones se han visto privados de la oportunidad de utilizar este espacio municipal, un espacio que se hizo para el uso de todos los caudetanos.

Sin embargo no ha habido ningún problema para que Nuevas Generaciones use La Sala para organizar una fiesta cuyos beneficios servirán para financiar otras actividades de dicha organización. El convenio firmado para la celebración del evento dice que servirá para financiar “el summer festival” de dicha organización. Veremos. Un convenio firmado por la concejala de Juventud, cuando quien debe firmar los convenios es el alcalde. Un convenio en el que no se especifica el pago de ninguna fianza que sí se ha exigido a otras asociaciones.

Nuevas Generaciones tiene todo el derecho a utilizar La Sala. Exactamente el mismo derecho que cualquier otra asociación o colectivo de Caudete. E incluso algunas de esas otras asociaciones puede que utilizasen los beneficios para una labor de mayor utilidad social. Y puestos a hablar de beneficios, quizá otros bares de Caudete hubieran estado interesados en gestionar las barras de dicha fiesta.

Asociaciones y pubs de Caudete tienen derecho a sentirse discriminados. La utilización de un espacio público con el objetivo de tener beneficios económicos aprovechando una fiesta tan popular como el carnaval hubiera exigido que el Ayuntamiento hubiera dado la oportunidad a todo el mundo de organizar dicha fiesta. Por el contrario, da la impresión de que un particular (Nuevas Generaciones) ha influido en una autoridad para que valiéndose de su cargo consiga una resolución favorable a sus intereses, obteniendo para sí, directa o indirectamente un beneficio económico.

Una vez más el PP gestiona los asuntos municipales pensando en sus propios intereses partidistas, violentando el principio de imparcialidad, objetividad y de defensa de los intereses generales  por los que se debe guiar todo gobierno.
                                                                                                                               

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